Acerca de...

Soy Naty. Natali. Tengo 19 años, 1 metro 73 de altura. Ni rubia ni morocha. Voy a la nutricionista para bajar de peso. No soy obesa ni tengo sobrepeso. Hoy peso 73kg. No fumo. No tomo alcohol. No voy a boliches. Un poco distinta al resto quizá. Hago patín artístico. Me gustan los autos, las motos. Ando en Karting. Me gusta la naturaleza, el río, el campo, la paz también. Toco un poco el piano. Soy muy introspectiva. Amo aprender. Odio estudiar. Rata de biblioteca me dice el copado de mi viejo. Dejé de ser lo que a mí y al resto le  gustaría a los 15 años.

Mis viejos: separados. Vivo y convivo con mi papá. Tengo novio hace 3 años y pico. Me lleva 12. Fui enferma de los celos. Enferma. Estoy recuperándome. Padezco baja autoestima.. Me duele ir a la psicóloga (por los $200 que me cobra por consulta/sesión) Es la única que me agrada por ahora. No voy seguido. Me hago la pelotuda.

Tengo un hermano mayor sólo por parte de mi dulce madre. Rubio, aparato. Peluquero. Drogadicto en “vías de recuperación”. Una sobrina preciosa por parte de él. Tengo otro hermano al que le llevo 7 años. Hijo de mi papá y mi mamá. Riesgo de diabetes. Morocho, aparato. Mi protegido. Anda en bici. Juega al basquet. Tiene pinta de rugbier. Lo llevo a la nutri conmigo. Por el puedo ser la más hija de puta de todas. No me lo toques al hermanito.

Las cosas con mi vieja son conflicto puro. Es irresponsable y egoísta. Quiero creer que está un poco loca. La quiero. La extraño. Esos sentimientos contradictorios son los que ella logra producir en las personas. Mi vieja me hace doler en lo más profundo.

Con mi viejo las cosas son diferentes. Es un tipo responsable. Bastante callado en casa. Tranquilo. Nunca se agarró a piñas con nadie. Fuma mucho. Es exigente conmigo. Nunca me felicita por nada. No me quiero parecer a él. Se esfuerza por ser buen padre. Lo quiero.  Me va a doler dejarlo cuando decida irme de mi casa. Es la persona que más veces ví llorar como un nene.

Estudié unos meses Relaciones Públicas. Dejé de estudiar para trabajar al lado de mi papá. No soy vaga  (no quiero creer que lo que me pasa es ser vaga), pero hace un año que le busco la rosca a la cosa, a la vida y no la engancho.

Y sí, para todos soy La Hija del Dueño-.